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La consejera de Economía ha conocido de primera mano los proyectos en este sector, clave para el desarrollo económico de Jaca y su área de influencia, dentro del Plan de Empleo promovido por el Ayuntamiento.El equipo de gobierno de Jaca, encabezado por su alcalde, Juan Manuel Ramón, expuso ayer a la consejera de Economía, Industria y Empleo, Marta Gastón, su Plan Estratégico Industrial, que se configura como una pieza clave para el desarrollo económico de la ciudad y su entorno dentro del Plan de Empleo promovido por el Ayuntamiento.

Gastón realizó una visita institucional a Jaca acompañada por el director general de Industria, Comercio, Pymes y Artesanía, Fernando Fernández, y tras firmar en el libro de honor y mantener una reunión de trabajo para conocer el dossier industrial de la ciudad ha subrayado la plena disposición de su Departamento a seguir colaborando dentro de sus competencias en el desarrollo económico de la ciudad y la comarca de la Jacetania.

Una colaboración que durante esta legislatura se ha plasmado por ejemplo en acuerdos sobre acciones de formación para el empleo del INAEM, la incorporación del Ayuntamiento de Jaca a la Fundación para el Desarrollo de las Nuevas Tecnologías del Hidrógeno en Aragón o las garantías de las necesidades de financiación del tejido empresarial local por parte de la Sociedad para el Desarrollo Industrial de Aragón (SODIAR).

Ayer se dió un nuevo paso en esa línea. En un amplio proceso de participación ciudadana a través de la Oficina Municipal de Fomento, el Plan de Empleo de Jaca incluye más de treinta iniciativas fruto del debate y trabajo llevado a cabo por las más de 200 personas -representantes de empresas y asociaciones, expertos y profesionales, así como ciudadanos a título individual- que han trabajado en cinco grupos sectoriales durante más de dos meses.

El grupo de trabajo dedicado al sector industrial ha marcado como objetivo prioritario establecer un corredor logístico que posibilite la implantación de industrias compatibles, así como potenciar la reconstrucción y rehabilitación en los pueblos y acercar las nuevas tecnologías a los núcleos rurales.

Situada en un enclave estratégico -a tan sólo 20 kilómetros de la frontera francesa, comunicada con los puertos del Cantábrico y el Mediterráneo y a la espera de la futura reapertura de la línea ferroviaria internacional del Canfranc-, Jaca busca ampliar su oferta industrial desde el punto de vista de la ecología y la sostenibilidad.

La capital de la Jacetania se ha distinguido como punto señalado de interés turístico, deportivo y cultural, pero ahora también quiere apostar por una industria responsable con el medio ambiente, centrada por su situación geográfica y su entorno natural en los sectores agro-alimentario, forestal, logístico, de nuevas tecnologías y energías renovables, con cabida tanto para empresas comarcales como internacionales.

La consejera señaló que una ciudad como Jaca que ha conseguido un alto grado de especialización, en su caso en turismo, debe mantener ese sector como prioridad, sin detrimento de que también busque una diversificación económica para seguir actuando como motor del conjunto del valle del Aragón.

Subrayó que el desarrollo a medio y largo plazo está ligado a la conectividad y particularmente a la proyecto de reapertura de la línea ferroviaria internacional del Canfranc, que -ha dicho- "tiene que ser un activo importantísimo para Jaca". En este sentido, señaló que la ventaja competitiva que ofrece la situación geográfica de Jaca junto a Francia "permitirá trabajar conjuntamente con Aragón Plataforma Logística", la sociedad pública que gestiona conjuntamente toda la oferta de la Comunidad en esta materia.

Gastón recalcó que hay que trabajar sobre las realidades y también sobre las potencialidades, pero sin generar falsas expectativas. A este respecto, el propio alcalde puntualizó que el desarrollo industrial de la ciudad y en particular del polígono de Martillué está supeditado a la reapertura del Canfranc, pero quieren llegar con los deberes hechos y van a realizar un estudio de demanda previo para comprobar que en ese escenario hay potencial real de desarrollo de suelo industrial, que se puede acompasar a la misma por fases.

Seis polígonos

Jaca cuenta con seis polígonos industriales, tres de ellos situados dentro del perímetro de la ciudad y los otros tres, en las vías de comunicación cercanas. En total, el municipio dispone de 61,4 hectáreas de superficie para uso industrial, espacio suficiente y adecuado para albergar un conjunto empresarial fuerte y cohesionado.

Los tres polígonos vecinos de la localidad son el de Campancián, el Llano de la Victoria y el de la Estación, este último en vías de extinción por la rectificación a uso residencial de su suelo. Y los situados en carreteras cercanas son Charlé, Rescanato y Martillué, ordenados de menor a mayor son polígonos de índole 100% industrial. El más pequeño de todos, con su espacio edi¬ficable completo, es Charlé, situado en la carretera N-330, en dirección a Francia.

Rescanato y Martillué se encuentran en la misma N-330, en el tramo contiguo a la autovía A21, una vía de alta capacidad que enlazará transversalmente Navarra y Aragón y conectará a su vez con otros viales del País Vasco y Cataluña formando toda una red al norte de la Península Ibérica.

Rescanato, prácticamente completo, es también un polígono de pequeña dimensión. En cambio Martillué, aún en una fase primaria, se distingue del resto por su magnitud, que alcanza los 420.000 m2. Aparte de su conexión con la A-21, en el futuro este emplazamiento industrial aspira a enlazar con las comunicaciones por tren y a tener, incluso, su propia red ferroviaria interna para la distribución de mercancías.

Entre las demás propuestas del Plan de Empleo de Jaca para dinamizar la economía local destacan factores como la recuperación de pastos, el cooperativismo, el aprovechamiento micológico, huertos urbanos educativos o el fomento de la agroindustria en el sector primario, además de la creación de la oficina de la montaña y el diseño de la Jaca deportiva en el sector turístico unido a la proyección del patrimonio histórico-artístico, los eventos en torno al Camino de Santiago o la organización de una feria de muestras hispanofrancesa en el ámbito del turismo cultural.